Resuelve
tus dudas
Preguntas
Frecuentes
¿Cuándo necesito acudir a un psicólogo?
Necesitas acudir a un psicólogo cuando tienes o sientes que un problema te desborda y ves como empieza a interferir en diferentes ámbitos de tu vida (empezar a dormir peor, dificultades a la hora de relacionarte…) y tus propias soluciones ya no funcionan como antes. Cuando sientes que estás perdiendo tu propia identidad, que tus emociones te desbordan o no las entiendes, te sientes solo y no encuentras consuelo en nadie más porque no te sientes comprendido.
¿Cuántas sesiones se necesitan y cada cuánto voy a tener que ir?
Las sesiones que necesitaremos dependerán de cada caso concreto, nuestro objetivo fundamental es que desde un inicio te sientas cómodo, ligero y orientado a trabajar en tu problemática. Lo ideal al inicio es vernos de forma más frecuente, para que puedas notar cambios más rápidamente pero todo dependerá siempre de tu disponibilidad de tiempo y económica. A medida que vamos mejorando y avanzando, las sesiones van espaciándose en semanas… ¡Hasta que no tengamos que volver a vernos!
No sé qué necesito, ¿ir al psicólogo o al psiquiatra?
La terapia psicológica y la atención psiquiátrica son cosas distintas pero que son compatibles y en muchas ocasiones es muy beneficiosa una atención conjunta.
En ocasiones en las que necesites medicación para romper un bucle, por ejemplo de elevada ansiedad o un estado de ánimo muy bajo, la combinación con la terapia psicológica te ayudará a mejorar.
La medicación nos sirve para el momento de malestar y el trabajo psicológico hace que la mejoría permanezca a largo plazo gracias a las herramientas que adquirimos en consulta.
En el caso en que te muestres dudoso, parte de nuestro trabajo irá enfocado a asesorarte para saber si la medicación sería recomendable para ti.
¿Cómo son las sesiones? Tengo miedo a no saber explicarme!
Cuando sentimos una tristeza profunda, no somos capaces de disfrutar de aquella cosas que normalmente nos ilusionaban, estamos cansados y parece que todo nos cuesta un mundo, incluso las cosas que consideramos mas pequeñas, nos sentimos culpables y responsables por lo que nos pasa o lo que pasa a nuestro alrededor, estamos hablando de un episodio depresivo. Atravesar un episodio depresivo o presentar un bajo estado de ánimo hace que nuestra vida se quede en pausa, es muy desagradable y nos lleva a ver la peor versión de nosotros mismos, nuestro entorno y lo que vendrá en el futuro. Desde terapia reducimos el malestar emocional localizando cuales son esos pensamientos “trampa” para aprender a identificarlos y poder darles la vuelta hasta unas creencias mas sanas y realistas.
Y recuerda! Todo lo que trabajemos y hablemos en consulta, no saldrá de aquí, gracias a nuestro código deontológico y por supuesto a nuestra ética personal y profesional.
¿Esto que me ocurre significa que me estoy volviendo loco/a?
Esta pregunta es un miedo muy habitual y la respuesta es clara: ¡No! Por norma general las personas no se vuelven locas, hay casos en que tendrán ciertas patologías graves y crónicas pero el que te sientas mal o con esa sensación de no ser tú mismo no implica ni significa que tu patología sea grave.
La mayor parte de las personas que acuden a consulta son personas “normales” que sienten un malestar que no saben cómo manejar y necesitan ayuda para sentirse mejor.
¿Quieres que hablemos?